lunes, 11 de mayo de 2020

AQUELLA GENTE DEL "VILLAVICIOSA" (329) JOSÉ PÁRAMO



JOSÉ PÁRAMO

Coronel de caballería jefe de Reemplazos del cantón de Fuente de Cantos (Extremadura); Teniente Coronel de Caballería del regimiento Constitución 8º de Caballería (antes Extremadura 3º de Ligeros, antes Villaviciosa 5º de Ligeros), Placa de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo.

CRONOLOGÍA

En el verano del año 1823, el teniente de caballería José Páramo solicita agregación a algún cuerpo del ejército.

A la Comisión de Guerra se pasó una instancia de don José Páramo, teniente de caballería, para que por las razones que expone se sirvan las cortes recomendarle al gobierno, a fin de que le agregue a algún cuerpo del Ejército.  [Diario de Palma 1.8.1823]





Lanceros de Villaviciosa (Extremadura 3º de Ligeros)
1835-1843

En enero de 1836 se incorpora al Regimiento la 2ª Compañía procedente de Medina de Pomar, y el 12 sale todo él para Santa Gadea en virtud de orden del Comandante General del Cuerpo de Ejército de Reserva. El capitán D. José Páramo con 50 caballos es destacado en persecución de una compañía de 100 hombres de los llamados Guías Alaveses, que iban por la izquierda del Ebro, recogiendo los mozos de los pueblos para aumentar la facción, logrando ahuyentar a dichos guías y obligarlos a alcanzar la sierra de Osma. El 17 salió el Regimiento con la fuerza disponible para Osma y la Plana Mayor y enfermería a Briviesca, al mando la primera del coronel Oviedo y encargado de la última quedó el Teniente Coronel D. José Diez, todo por orden del General en Jefe, quien el mismo día de la llegada del coronel Oviedo le ordenó pasarse con 3 escuadrones a Quincoces, haciéndolo el otro a la sierra de Burgos, que fue el 4º mandado por el capitán D. José Páramo. Desde esta fecha Villaviciosa se halla en continuo movimiento, dando mitades y partidas sueltas, mandadas por oficiales, sargentos y cabos, prestando el servicio avanzado de campaña, ya conduciendo convoyes y correspondencias, ya internándose en el país enemigo para observar los de los carlistas, de modo de merecer los mayores elogios de los generales y jefes con quienes operaron. El 31 de marzo el capitán D. José Páramo que en la sierra de Burgos con el escuadrón que mandaba tenía en constante movimiento y activa persecución a las gavillas de rebeldes que en aquella pululaba, logró alcanzar en el pueblo de Nebreda una de estas compuesta de 13 hombres que hizo prisioneros apoderándose de varias armas y otros efectos.

El escuadrón al mando del capitán D. José Páramo que operaba en la sierra de Burgos a las órdenes del coronel Azpiroz y en persecución de la facción que capitaneaba Basilio (se refiere a Basilio García Velasco, jefe militar carlista), que la había invadido, mandó el 11 de junio al capitán D. José Rubio Guillén con 16 caballos sobre el pueblo de Cerón en observación de los carlistas, y con tal éxito lo hizo este último que les cogió 20 prisioneros, 56 caballos, 40 fusiles y varios efectos de guerra más las raciones que tenían recogidas y rescatando a mucho pudientes de Goria y otros pueblos que llevan presos. Por otra parte, el capitán Páramo con su partida que estaba destinada a secundar a la primera, alcanza la retaguardia de la facción logrando apoderarse de 18 prisioneros y porción de armas y municiones, y reuniendo la fuerza del escuadrón en la noche del mismo día, 11 de junio, aún volvieron a quitar al cabecilla citado más prisioneros, caballos y efectos. El 20 el teniente Gómez de dicho escuadrón con 12 soldados encontró en Lerma una partida enemiga, cargándola y matando a 4 y dispersando a los demás.

A esta sazón había invadido el cabecilla Gómez (se refiere a Miguel Gómez Damas, jefe militar carlista) el distrito de Castila la Vieja por la parte de Palencia por lo cual el capitán D. José Páramo que, como se lleva dicho, operaba en la sierra de Burgos formando parte de la columna del coronel Azpiroz, pasó con 30 caballos a unirse a la del Brigadier Samper. Si heroicamente se batían los soldados de este cuerpo en colectividad, los rasgos de extremado valor individuales que llevaron a cabo exceden a toda ponderación. Tal es el que el soldado Miguel Bonilla ejecutó el 8 de agosto a la entrada del pueblo de Burón, donde cargó a un grupo de Caballería enemiga, mató a 2 facciosos e hizo 3 prisioneros, por cuyo especial mérito el brigadier D. Ramón Solano con quien iba de ordenanza le recomendó señaladamente al General Espartero en el parte que le dio de la gloriosa acción de Escaro.

Partes recibidos en la secretaría de Estado y del Despacho de la Guerra. Ejército de operaciones del Norte. = División de vanguardia. = Excmo. Sr.: Con fecha 12 del actual tuve el honor de elevar a conocimiento de V. E. las órdenes terminantes que había comunicado al coronel D. Javier de Azpiroz, comandante general de la Sierra, para perseguir sin descanso los 25 lanceros enemigos que pasaron el Ebro por los vados de Agoncillo el 6 del mismo; que le reiteré con presencia de la Real orden sobre el p articular, que V. E. se dignó remitirme el 11, indicándole lo que urgía su pronta destrucción , por si el objeto principal de aquellos forajidos era llevar alguna comisión de importancia al cabecilla Gómez; y en desempeño satisfactorio de su comisión, aunque en pequeño de suma trascendencia, me d ice aquel celoso jefe desde Lerma el 16 del corriente mes lo siguiente: Apenas tuve noticia de la presentación en esta sierra de una partida de 15 a 20 lanceros enemigos, hice salir otra de igual número de caballos del 3.° ligero a las órdenes del capitán del mismo cuerpo D. José Páramo, y tengo la satisfacción de anunciar a V . S. que la referida partida de rebeldes fue ayer derrotada y dispersada con muerte de seis de ellos, según parte que recibo en este momento. Entre los muertos lo ha sido un sargento 2° a quien se han cogido algunos papeles que reconoceré y noticiaré a V. S., si ofreciesen interés. Mañana emprenderé con la columna una batida general para limpiar la sierra de las partidas de enemigos que abriga. Lo que traslado a V. E, para su superior conocimiento y fines consiguientes, quedando en manifestarle el contenido, o remitir los documentos originales aprehendidos al difunto sargento rebelde, tan pronto como Azpiroz me participe el resultado del reconocimiento que ofrece. Dios guarde a V. E. muchos años. Sigüenza 18 de octubre de 1836. =: Excmo. Sr. Ramón María Narváez. = Excmo. Sr. general subsecretario encargado del Despacho en el ministerio de la Guerra. [Gaceta de Madrid: núm. 681, de 21/10/1836, páginas 2 a 3]



El comandante general de la provincia de Burgos en 19 del actual dice lo siguiente: Excmo. Sr.: El Sr. jefe político de esta provincia me traslada con esta fecha un oficio que ha recibido con la misma, del que resulta: Que el 15 del actual fue sorprendida una partida de facciosos en el Carrascal de Cilleruelo de arriba, por otra del 3.° ligero de caballería al mando del capitán D. José Páramo, y que habiendo, dejado en aquél punto cuatro muertos de aquellos, fueron enterrados por la justicia, precedido el aviso de dicho capitán. [Gaceta de Madrid: núm. 683, de 23/10/1836, páginas 2 a 3]


El Escuadrón de depósito marcha el 6 de enero de 1837 para acantonarse en la Villa de Morata (Castilla la Nueva). No hubo incidencias que merezca mencionarse desde dicha fecha hasta la del 23 de marzo que salió de aquel punto el capitán D. José Páramo con 50 caballos, incorporándose en Arganda a la brigada mandada por el coronel Mendívil que se dirigía a los reinos de Aragón y Valencia a operar contra las facciones de Cabrera y demás cabecillas, habiendo tenido lugar varias escaramuzas y choques, pero de escasa importancia.


Un destacamento que servía en Villanueva de Mena al mando del teniente D. Francisco Montesinos y perteneciente al escuadrón, logró dar alcance el 19 de abril al cura Barrio y su partida, destrozándola completamente y dejando libre dicho valle de Mena de aquella partida que ya no volvió a presentarse en él. En el mismo día los 50 caballos que al mando del capitán Páramo acompañaban a la brigada Mendívil dispersan una fuerza carlista en el Naval, cerca de Nules, causándole sensibles pérdidas. El mismo capitán el 26 del citado mes, con 14 caballos cargó a las avanzadas enemigas en Doucuño, cogiéndoles 2 caballos y 1 yegua y con el total de su fuerza y una compañía de granaderos de la Guardia Real de Infantería cargó y desbarató a la facción de Tallada, dispersándola y haciéndole algunos muertos, tomándole además armas y efectos. A esta sazón mandaba ya la Brigada Mendívil el General D. Francisco Puig Samper. Continúa dicha Brigada operando activamente tanto que el 3 de mayo siguiente 50 caballos del Regimiento sorprenden a la facción en Chelva, apoderándose del hospital del enemigo donde se hallaban unos cien hombres entre enfermos y heridos, Haciéndoles además 3 oficiales y 30 individuos de tropa prisioneros y cogiéndole además bastantes efectos de guerra. En esta sorpresa y yendo en vanguardia de la Brigada el capitán Páramo cargó con 30 caballos al mayor de los grupos en que se dispersó la facción, batiéndole y matándole 10 hombres entre ellos un coronel, e hiriendo a mucho más y cogiéndoles caballos, armas y efectos entre estos bastantes uniformes de su Caballería. En la citada acción mereció recomendación especial el ayudante D. Ramón Cargas, Sargento D. Joaquín Boira y soldado Julián de Pedro.

A consecuencia de la invasión en Castilla la Nueva de la expedición del Pretendiente Don Carlos, salió de Vallecas el 11 de septiembre el teniente D. Antonio Roldán con 30 caballos en dirección a la villa de Arganda y llegando al sitio llamado Campillo de Tajuña se encontró con la vanguardia carlista y abatió con sus avanzadas haciendo prodigios de valor. Obligado empero a retirarse por lo escaso de su fuerza, y aún al verificarlo salvó a muchas familias que huyendo del enemigo vinieron a acogerse al amparo de nuestros jinetes que las pusieron en seguridad. El teniente Roldán se incorporó aquella noche al escuadrón del que procedía y mandaba el capitán Páramo. Pasaron la noche acampados entre Arganda y Vallecas, pero habiendo avanzado el enemigo en dirección a la Corte, tuvieron que retirarse incorporados ya a su escuadrón el de granaderos a caballo de la Guardia Real y una pieza montada de artillería, llegando con ellos a Vallecas y haciendo alto en las afueras del pueblo como quien va a Madrid. La excesiva fuerza que el 13 cargó sobre la nuestra del enemigo puso en grave riesgo al escuadrón de la Guardia y la pieza de artillería antedicha, por lo cual el comandante D. Leopoldo de Combe que ya mandaba el todo de la fuerza, dispuso que el capitán Páramo con el escuadrón del 3º Ligero diese una carga que no podía menos de ser aventurada y con objeto de salvar a los granaderos. Así se verificó y con tal ímpetu y valor que hicieron volver cara a la caballería enemiga hasta más allá del pueblo de Vallecas que se refugió en el grueso de sus fuerzas, volviendo el capitán Páramo a incorporarse a las de que dependía. Por la tarde hallándose ya en el portazgo de Madrid amagó algunas cargas al enemigo que fueron frustradas tomando posición unos y otros en dicho sitio y dándose un momento de tregua y descanso bien necesario por ambas partes. En este momento se presentó el Inspector General D. Valentín Ferraz y dirigió por sí mismo nuestra reducida tropa que no se había aumentado en más de los dos escuadrones, pero con la cual aún pudo dar una lección al enemigo y probar que no era parte el cansancio para amortiguar el denuedo y bizarría de los soldados del 3º Ligero. El resultado de esta serie de choques fue haberles muerto y herido bastante gente a las avanzadas carlistas, entre ellos un titulado jefe de Estado Mayor y de nuestra parte dos soldados y 7 caballos muertos. Otro escuadrón carga el 14 en Abades a 4 batallones carlistas que en columnas paralelas marchaban en retirada. El escuadrón que mandaba el comandante Pou asistió con la División del General Lorenzo a la acción dada el 19 a la facción del Pretendiente en Pozuelo y Arazueque. Siguió afecto a la División la fuerza disponible de dicho escuadrón a las órdenes del teniente D. Rafael Ruiz, por haber pasado al escuadrón de Depósito el comandante Pou. El 28 unida ya la facción del Pretendiente a la que mandaba Zariategui fue alcanzada en Aranda de Duero por la División referida y atacada en ese punto; el teniente Ruiz dio varias cargas contacto acierto y arrojo que el general Lorenzo le recomenzó al que lo era en jefe, otorgándose varias gracias a la fuerza de su Mando. Alejada la facción de las inmediaciones de Madrid salió el capitán Páramo de Vallecas con su escuadrón pasando a la provincia de Ciudad Real el 1 de octubre. El 14 el capitán D. Lorenzo Benítez que con tres mitades de su escuadrón marchaba unido a la columna que mandaba el Comandante General de la Mancha, cargó a unos 250 caballos de la facción de Palillos y persiguiéndoles más de dos leguas, matándoles 4 hombres, apoderándose de 10 yeguas y bastantes armas sin más pérdida de nuestra parte que un hombre y un caballo, a consecuencia de este glorioso hecho de armas y por Real Orden de 16 de noviembre siguiente se dieron las gracias en nombre de S.M. a los señores oficiales y tropa que componían la fuerza del 3º Ligero al mando del capitán Benítez y a este el grado de comandante. Es de advertir que está ya en posesión de él por la acción del 25 de abril de 1836, en que se le había otorgado. El 21 de octubre el capitán Páramo tuvo un choque en Argamasilla con las partidas facciosas que perseguía en la provincia de Ciudad Real, matando 6 hombres y dispersándolas completamente, tanto que se presentaron a indulto de sus resultas veinte y tantos hombres. En la madrugada del 22 de octubre hallándose el cabo 2º de este regimiento José Sánchez con 6 hombres montados del mismo y 5 del 1er Batallón Franco de Castilla la Vieja en la posada del pueblo de Cernania fue atacado por una partir facciosa de unos cien caballos y 30 infantes, pero se defendió con tanto tesón y tan elevado ánimo que despreciando las oferta que le hicieron lo mismo que un fuego horroroso, tuvieron que retirarse aquellos llevándose 8 heridos entre ellos uno que parecía jefe y dejando 2 caballos muertos; este hecho heroico valió al citado cabo y a los individuos que le acompañaron el distinguido premio de que se les diera las gracias en nombre de S.M., por Real orden de 27 del mismo mes de octubre.

...Mas acostumbrados a enristrar la lanza y esgrimir la espada que a manejar la pluma probablemente nos hubiéramos abstenido de esta polémica, sino hubiésemos visto que Vds. persistían en su errado concepto. Este incidente y el de considerarnos testigos presenciales y de excepción en el suceso en cuestión, el uno como capitán, comandante accidental del escuadrón 3.° ligero y el otro como teniente graduado de capitán que mandó en aquel día la mitad de caballería a que Vds. se refieren, y con que fueron hasta las inmediaciones de Vallecas los señores jefes y oficiales que nombran, nos ponen en la precisión y nos autorizan a entrar en la lid con la confianza de que la verdad y solo la verdad brille en todo su esplendor contra exageradas suposiciones... ... Somos de Vds. señores redactores, s. s. q. s. m. b. = El capitán comandante del escuadrón 3º ligero, José Páramo. —El comandante graduado, José Guillen Rubio, El capitán ayudante, Ramón Pérez de Vargas. —El capitán graduado que mandaba la mitad, Antonio Roldan. [El Eco del Comercio 21.9.1837]


Almagro 6 de diciembre. El benemérito comandante del 3.° de ligeros D. José Páramo a la cabeza de su lucido escuadrón incansable, recorre el término de su demarcación; y aunque hasta el día no ha tenido el gusto de alcanzar el grueso de la facción, porque le huye la cara , ha hecho servicios importantes, dignos por cierto de que se les de publicidad, tal como haber quitado a la canalla más de 30 cabezas de ganado que habían robado a varios particulares de Villarrubia, y por nuestros soldados fue devuelto a sus dueños. Continuando sus movimientos se dejaron ver unos 15 o 20 facciosos, y al momento los dispersó una guerrilla, causándoles tres muertos, tres prisioneros, que sufrieron la suerte de los primeros, cogiéndoles además cinco yeguas, un caballo, armas y otros efectos. Este jefe, tan militar como afable y prudente, está animado de los mejores deseos, y no hay duda de que con su brillante escuadrón y la fuerza proporcionada de infantería sería el terror y azote de la canalla facciosa; pero desgraciadamente carecemos de aquella arma tan necesaria para el país que sirve de refugio a las fieras facciosas. [Gaceta de Madrid núm. 1117, de 20/12/1837, página 2.]

En los comienzos del año 1838, con efectividad del 3 de agosto de 1837, recibe grado de teniente coronel de caballería.

Sale el 11 de enero de 1838 de Vallecas un escuadrón al mando del Brigadier D. Agustín Oviedo para incorporarse a la División que mandaba en la Mancha el General D. Laureano Sanz, reuniéndosele en el camino los dos que se mantenían guerreando en la misma provincia al mando de los comandantes D. Lorenzo Benítez y D. José Páramo. Verificada ya la reunión emprendió la División antedicha la persecución de las facciones de Basilio, Palillos (se refiere a Vicente Rujeros, militar carlista) y Tallada (se refiere a Antonio Tallada, militar carlista), llevándola por delante hasta hacerla salir de Ciudad Real. Pernoctó nuestra fuerza en Linares el día 4 de febrero y el 5 a  las 7 de la mañana salió de este punto marchando por el vado y presa del molino del río Guadalimar (que la noche anterior se había desaguado para facilitar el paso) y adelantándose la caballería hacia los enemigos que se dirigían a Baeza y próximos ya a Castril fueron cargados por aquélla con un arrojo y decisión imposible de superar, basta decir que constando la fuerza nuestra de un escuadrón del 3º Ligero, al mando del comandante Benítez, 2 del Regimiento de Borbón y uno de Francos de Andalucía, hicieron más de quinientos prisioneros de la clase de tropa, 1 Jefe, 16 oficiales, 1.200 fusiles, 2 piezas de artillería y considerable número de efectos de guerra, quedando el campo materialmente cubierto de cadáveres y la facción completamente destruida. Tuvo el regimiento escasas aunque sensibles pérdidas en hombres y caballos; y por la recompensa que obtuvieron los Jefes, Oficiales e individuos de la tropa además de la condecoración que se crea para premiar a toda la fuerza que concurrió a esta gloriosa acción y que señalaremos a continuación, se comprende la parte tan principal que le cupo a este Regimiento en ella: Cruz de 3ª Clase de San Fernando al brigadier Oviedo; grados de teniente coronel a los comandantes Páramo y Benítez; de Capitán a los Tenientes D. Vicente de Castro, D. Tomás Fernández y D. Luís Fuenmayor; de Tenientes a los Alféreces D. Nicolás Molero, D. Miguel de la Vega, D. Gonzalo de Sousa y D. Juan Martínez; mención honorífica a los Ayudantes D. Manuel Aysa y D. Antonio Serrano; grado de Sargento 1° a los segundos Saturnino de las Casas y Miguel de la Cruz; 12 cruces sencillas de Isabel II repartidas entre los acreedores por su comportamiento, y una con premio al soldado José Parra que cuerpo a cuerpo se batió y dio muerte a un capitán carlista, las cortes en sesión pública declararon que les había sido muy grato el importante servicio prestado por todas las tuerzas que concurrieron a la acción de Baeza y Castril.


Cuerpo de operaciones en persecución de las facciones expedicionarias. Excmo. Sr.: El brigadier D. Ramón Pardiñas, comandante general de la vanguardia de estas tropas, me entregó en el día de ayer el parte siguiente: Ejército de operaciones del Norte. = Segunda división. = Excmo. Sr.:
… No había momento que perder: la caballería entró al galope: los cazadores avanzaron de nuevo con un ardimiento a que nada pudo resistir: el ruido del huracán, el galopar de los caballos, y los vivas entusiasmados de los hijos predilectos de la patria llevaron el terror a los esclavos. La mitad de los tiradores de Extremadura, al mando del alférez D. Felipe Lázaro, hizo prodigios de valor: el teniente coronel de Borbón D. Manuel Arregui, el comandante D. Ricardo Shelly y los capitanes D. Mariano Baquedano y D. José Antequera, y el alférez D. Cristóbal Jimeno, se distinguieron como siempre entre los bravos. El comandante de Extremadura D, José Paramo, el graduado capitán D. José Rubio Guillen, y el capitán D. Ramón Pérez Vargas, manifestaron su decisión; no me es posible señalar a V. E. individualmente tantas acciones distinguidas corno tuvieron lugar en esta noche memorable; pero no puedo pasar en silencio el mérito particular que contrajeron mis ayudantes de estado mayor… [Gaceta de Madrid: núm. 1210, de 19/03/1838, páginas 2 a 3]


Ciudad Real 8 de abril de 1839. En la carretera de esa corte a Andalucía fue atacado un convoy de 44 carros de Manzanares en las inmediaciones de Puerto Lapice por 50 caballos facciosos mandados por el cabecilla Saturno. El comandante de la tercera columna de operaciones don José Páramo tuvo noticia de este acontecimiento y dispuso que I 4 caballos al mando del teniente D. Ramón Figueroa y del alférez D. Andrés Loscos se dirigiesen inmediatamente al sitio en donde se resistían los carreteros, protegiendo el movimiento con el resto de la fuerza el referido comandante, logrando dar alcance a los forajidos y matarles un cabecilla, que no expresa su nombre, y nueve facciosos más, habiéndoles cogido bastantes caballos y otros efectos, y herídoles algunos hombres. [Gaceta de Madrid: núm. 1609, de 12/04/1839, página 4]


El comandante general de las provincias de Ciudad-Real y Toledo dice en comunicación del 9 que por consecuencia de un esfuerzo grande, hecho por los rebeldes que recorren aquel territorio se reunieron 200 caballos y 500 infantes, con el objeto, según noticias de sus confidentes, de atacar a la tercera columna al mando del comandante D. José Páramo situado sobre Villanueva de los Ojos; pero que recibido oportunamente este aviso, dio las órdenes convenientes para que incorporadas i dicha columna la primera y tercera marchasen rápidamente sobre el enemigo, teniendo ya parte de haberlo efectuado, y que reunidas en Malagón, se dirigieron el 5 en busca de aquel a los cortijos de Malagón y sierras del Espíritu Santo. [Gaceta de Madrid: núm. 1638, de 11/05/1839, página 1]


El comandante general de Ciudad-Real y Toledo en el que da desde este último punto, con fecha 24 del actual, manifiesta que el comandante de la tercera columna de operaciones D. José Páramo, dio alcance el día 15 en la inmediación de Herencia a un grupo de facciosos, a quienes quitó 600 cabezas de ganado que habían robado a dicho pueblo. [Gaceta de Madrid: núm. 1784, de 28/09/1839, página 1]


Con efectividad de 29 de julio de 1839 recibe empleo de teniente coronel de caballería.

… Que la columna del coronel Oribe debió pernoctar ayer en Valdeolivas, la del Júcar a cargo del teniente coronel mayor de caballería D. José Páramo, estaba el 9 en Puente del Gabriel en observación de dos escuadrones enemigos que intentaban pasar a la Mancha para oponérseles, y la de Guadalajara, después de haber dejado el 7 en Molina un convoy, marchaba el 8 en dirección de Zaorejas pasando el Tajo por el puente de S. Pedro para aterrar a los rebeldes, y reanimar algún tanto el espíritu de los pueblos de aquellas inmediaciones apoyado por la suspensión del sitio. [El Corresponsal (Madrid). 14/6/1840]

El día 6 de julio de 1840 termina la llamada “Primera Guerra Carlista”.

El ayuntamiento y milicia nacional de la Roda, cabeza de partido judicial en la provincia de Albacete, a V. A. con todo respeto dicen: Que hasta el día han tenido estas corporaciones las puertas de los tribunales cerradas, y ni aun se han determinado a pedir con justicia lo que les pertenecía, porque un partido contrario les hacía frente a sus reclamaciones. La prueba más clara que se puede dar de este aserto, es la acción y victoria que consiguió este pueblo el 1º de febrero en el año presente que después de bajar el orgullo del cabecilla rebelde Arnau que se presentó en esta a la cabeza de nueve escuadrones y cuatro compañías de infantería, por sola la milicia y su vecindario se le rechazó, hiriendo a uno de los cabecillas y librando de sus garras a un escuadrón del 3 ° de ligeros como podrá justificar su teniente coronel mayor don José Páramo y toda la oficialidad. Este hecho que tanto honor presta a los habitantes de la Roda, después de haber arrojado en otra ocasión a balazos a los enemigos que se hablan introducido hasta la plaza de la Constitución, ni aun en el boletín oficial de la provincia le han visto publicado... [El Eco del comercio. 15/11/1840]


El 1 de enero de 1841 pasó revista el regimiento con 829 hombres y 690 caballos, con los cuales cubre el servicio de Sevilla y los destacamentos del puerto de Santa María. En el mes de febrero son destinados al cuerpo 159 caballos que pertenecían a cuerpos francos, y obtiene su licencia absoluta la fuerza que correspondía a la quinta de 1831 (tras 10 años de servicio, de los cuales 7 los pasaron en campaña continua contra los carlistas) y los que habían sentado plaza voluntariamente durante la guerra, habiéndose incorporado con el teniente coronel supernumerario D. José Páramo al depósito que estaba a sus órdenes.

A comienzos del año 1843 le es concedida la Placa de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo.

Ministerio de la Guerra. Por Resolución del 11 del actual y de conformidad con el dictamen del tribunal supremo de Guerra y Marina, se ha servido S. A. el Regente del reino condecorar con las placas de la orden de S. Hermenegildo a los individuos siguientes: Placa. —D. José Páramo, teniente coronel supernumerario del regimiento de caballería de La Constitución número 8. [El Archivo Militar 17 de enero de 1843]

Seis meses después es nombrado comandante militar de la plaza de Ronda, en el Tercer Distrito militar.

CAPITANIA GENERAL DEL TERCER DISTRIT0 MILITAR. El comandante militar de Ronda y su serranía, teniente coronel del octavo de caballería don José Páramo, desde Arcos de la frontera, con fecha de ayer, comunica al excelentísimo señor capitán general de este distrito lo que sigue... [El Espectador 6.7.1843]

Durante el año 1844 se encuentra en situación de reemplazo en Llerena; promovido al empleo de coronel de caballería, a mediados del mes de septiembre de 1846 es nombrado jefe de los Reemplazos del cantón de Fuente de Cantos (Extremadura); por Orden de 4 de diciembre de 1846 se le concede el retiro.



Guillermo C. Requena





FUENTES:
BNE- Hemeroteca Digital.
BVD- Biblioteca Virtual Defensa.
BOE- Gazeta Colección Histórica.
PARES-Ministerio de Educación
BVPH-Ministerio de Educación

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